viernes, septiembre 12

Así es cómo aquí nunca se inventará la rueda

- ¡Usted como que está loco! Dígame… ¿qué utilidad tendría ese perol en forma de casabe o arepa coreana que trae entre manos?
- Muchísimas utilidades. Déjeme explicarle…
- Ya va, que voy al baño y vuelvo… Ajá… ¿cómo me decía que se llama eso que trae ahí?
- Rueda. Este invento mío se llama rueda.
- ¿Y para qué sirve, me pregunto yo?
- Bueno, la rueda podría llegar a ser una metáfora increíble. Gracias a su contribución al desplazamiento, presiento que la gente dirá algún día que su vida va sobre ruedas o, si el asunto empeora, podremos echarle la culpa a la rueda del destino.
- Práctico, sea práctico, que en esta oficina no estamos pa´ coplas.
- Bueno, este invento mío prestaría beneficios en muchos campos. Por ejemplo, hoy a las madres se les acalambran los brazos por cargar todo el día a los tripones; pero con este invento mío, mañana podrán irse a pasear al parque llevando a sus críos en el interior de un cochecito.
- Pero ya el cochecito fue inventado.
- Sí, pero no tiene ruedas. Y hay que ver cómo sufre una madre arrastrando un cochecito sin ruedas.
- Ujum ¿Y eso daría real?
- ¡Claro! La rueda del casino sería una de las atracciones favoritas en Las Vegas, mientras una legión de empresarios amasaría fortunas insólitas en las ruedas de negocios. Eso sin mencionar a la Pirelli o a la Goodyear. Aunque la gente me va a odiar porque esto puede traer cola.
- No plagie, mire que ayer vinieron un planificador urbano más seis fiscales de tránsito a patentar la cola. Pero bueno… ¿Y ya usted inventó alguna otra cosa que le sirva de credencial? No sé, un Abdominazer o algo así.
- La verdad, no.
- ¿Y no trae una carta de recomendación, una tarjeta firmada, cualquier papelito que lo represente?
- Tampoco.
- Bueno, vamos a ver cómo arreglamos esa carencia… Si contáramos con su desprendida generosidad, quizá podríamos... ¡Ya va, que tengo una iluminación! ¡Señores… acabo de inventar la comisión! Y usted será el primer afortunado en mojarme la mano.
- Es que ahorita ando corto.
- ¿Así es la cosa? Llene entonces estos quince formularios, diríjase al registro mercantil, cancele allí los impuestos municipales y, tras adquirir las estampillas de rigor… ¿ve usted esa fila de allá? Pues póngase delante de aquel tipo que asegura haber extraído del sedimento de moho una cura a las infecciones, justo al lado del barbudo que trae un manuscrito de no sé qué cosa de La Mancha.
- ¿Detrás del señor ese que plantea poner goma de borrar al otro extremo de los lápices?
- Como usted quiera.

3 comentarios:

Quesada dijo...

Hola amigo, soy administrador de www.parapartirse.com, una web de vídeos de risas, hemos abierto hace poco, pero lo planeamos en grande, de momento en 3 días hemos publicado más de 300 vídeos de humor, me encantaría realizar un intercambio de links con su blog. Si le interesa, contesteme en www.parapartirse.com en comentario o en admin@parapartirse.com.

Saludos!

Principito dijo...

Está claro, la burocracia no tiene ruedas

Yudith Valles de Perez dijo...

Hola Castor te deje el Premio Incoherente para tu blog que tiene por demas coherencia! Besos