martes, mayo 5

Aquí se habla Willy May

Varios amigos de Maracaibo, donde nací y crecí, han emigrado a los Estados Unidos en procura de porvenir. Cuando chateo por Messenger con alguno de ellos, la comunicación suele estar mediada por la nostalgia más un muy interesante fenómeno lingüístico: una mezcla de español e inglés impregna el diálogo, aunque no es precisamente espanglish, o tal vez sí pero en una curiosa variante que combina el idioma de Shakespeare con la jerga maracucha.
A mitad de camino del aprendizaje de una nueva lengua, mis amigos en el exterior resisten desprenderse de aquellas palabras que los remiten a casa, fijando residencia verbal en uno y otro idioma (0, para ser exactos, en ninguno de los dos). Como ejemplo, reproduzco en estas líneas una reciente plática, eso sí, suprimiendo mucha de la terminología zuliana presente en la versión original con el propósito de que el asunto no resulte indescifrable para los lectores de otras latitudes:
- ¡Epale, primo!
- ¡Creature, qué de times! Estáis más lost que el hijo de Limbert.
- ¿Cómo está eso allá en el norte?
- No es por grillúo or hablachento, pero por aquí todo está everything's fine, ar hand. ¡Esto es bien beautiful! Hay como un Sambil mollejúo en cada corner y no se ven chirrincheras de route six ni un solo huele glue en la calle. Eso sí: durante los winters uno tremble como un machorro.
- Aunque con lo de la crisis la cosa está un poco fea.
- Well, lo del business is a good lavativa. He tenido bad milk, pero ya sabéis: God pressed but not ahoga.
- ¿Y qué estás haciendo para sobrevivir?
- Desde que llegué aplaudiendo en el airplane he dado más vueltas que cherry en boca de old woman: trabajé de guachimán, poniendo ampoyetas, cargando busacas y hasta de mesonero sirviendo pocillos en una coffee shop. Aunque, para serte franco, aquí los clientes son very agallúos. He pelado full ball, a veces sin cobres ni para el market.
- ¿Y qué es lo que más extrañas?
- ¡No sabéis cómo quisiera comerme un patacón a base de plantain! Pero he formado un grupo de friends con un gocho más un muchacho er devil margariteño. Occasionally, hacemos una muuuuu para comprarnos unas beers en el depósito.
- ¿Y los amores?
- Mijo, honestly, acá las ladies son medium farfullas, como de yelo. Si no tenéis ni una burusa de cash, te fregaste, te tratan como un wircho.
- ¿Y por qué no te regresas?
- ¡A la lona! Aunque aquello sea lo best de la bolita del world, aquí sigo arronzando mis Sweet Dreams y mis Beautyrest. Además, la jaiva por allá no está muy cool que se diga.
- Algo así.
- Wow! Aunque estemos de polo a polo, no me puedo hacer el Willy May cada vez que veo en los Panoramas en inglés lo que pasa allá. Siento que me metieran un knock-out en el alma, un cariaco en el heart.
- Bueno, al menos se nota que ya eres políglota.
- Pa´ que you véais. Pero te dejo la parraguera que ya me toca pasar lampazo en la coffee shop. Cuidate, cousin, nos estamos wachando y que the Virgin of la Chinita esté always con vos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No quiero criticar a tus amigos, Óscar. Pero siempre he defendido el hecho de que cualquiera que se vaya del país ya sea para su porvenir económico u otra causa, tal vez se elleve alguito de su país original, pero se trae al montón TODO UN UNIVERSO DEL PAÍS AL QUE SE FUE A "PROGRESAR". Tomo como énfasis al Norte, como lo es el caso de tus amigos. Podría decirse además que salieron con unas alpargatas y regresaron calzando unos caros Cartier. Salieron oliendo apenas el cafecito que se tomaron en Maiquetía esa madrugada; y vuelven oliendo a Versace. O mejor aún y hasta más notable, SALIERON HABLANDO SU LENGUA HISPANA CON ORGULLO PATRIO Y SU GIRO ORIENTAL, ANDINO, BARLOVENTEÑO, MARACUCHO O LLANERO; Y VUELVEN HABLANDO EL MÁS REPUGNANTE Y ESTÚPIDO "SPANGLISH", DIGNO DE LA TAMBIÉN ESTÚPIDA MANIA DE CONFUNDIR LAS CULTURAS. Espero tus amigos al volver(si es que vuelven) no se traigan sino alguna cosita de Gringolandia y mucha nostalgia de sus olvidadas costumbres, ¡VIVA LA PATRIA!