Guía para celebridades en Twitter

Todos cometemos errores en Twitter, pero cuando se trata de celebridades el eco es mayor debido a la notoriedad del usuario más la gente malintencionada y envidiosa que anda al acecho para barrer el piso con la luz de las estrellas; así que si tú eres un popular personaje del canto, la actuación o sencillamente Alicia Machado, no renuncies a disfrutar de los beneficios publicitarios que ofrece el microblogging ¡pero eso sí!: toma las siguientes precauciones con las que mantener íntegra tu reputación y salir airoso del trance si algún día metes (de nuevo) la pata:

Sé caritativo
Es sabido que en las redes sociales los famosos sólo interactúan entre sí, aunque esta regla incluye una excepción quincenal, ocasión cuando dejarás en evidencia tu espíritu bondadoso dándole RT al mensaje de un seguidor común y corriente, de esos que fastidian en grupos de quince por minuto. Claro, ya lo de responder con comentario y todo el tuit de un anónimo es como mucho y dependerá de si estás en pleno lanzamiento de un disco, por emprender una gira o protagonizar una telenovela.

Conoce tu causa
Si amaneciste solidario y decides apoyar una causa social, el primer paso antes de explayarte en mensajes filantrópicos es darte una pasadita por Google para evitar el resbalón de escribir planteamientos como: “¿Estos calorones serán por el calentamiento global?” o “¡Elevemos nuestras plegarias por los pobrecitos de la calle del hambre!”.

Desvía la polémica
Si la concurrencia digital te cae en cayapa luego de que enviste un tuit poco afortunado, pedir disculpas y no arremeter en contra de los detractores son salidas inteligentes, aunque la opción más sana para remediar la pelotera es desviar la discusión interponiendo un segundo foco de interés. Por ejemplo, si eres Sofía Vergara y la embarraste en Twitter, publica mediante TwitPic una foto en donde aparezcan tus atributos al aire, con lo que la controversia que te azota pasará inmediatamente a segundo plano.

Link indispensable
Coloca Wikipedia como página de inicio de tu explorador.

Aprende de Edgar Ramírez
Cuando Al Pacino le ganó el Globo de Oro, el venezolano asumió con gallardía la situación y no se puso con cómicas del tipo: “Ese premio fue comprado” o “¡Al Pachimbo!”.

No aclares
La experiencia de las celebridades en Twitter demuestra que casi siempre el remedio es peor que la enfermedad. Recientemente la ex RBD Dulce María pretendió irrumpir en la literatura enviando la siguiente y muy criticada figura poética: “Como un tsunami en Japón puedes hacer que tus olas me revuelquen el maldito corazón”. El verdadero revolcón vino luego cuando la intérprete pretendió aclarar: “Lo siento mucho… Solo lo decía por el efecto mariposa”.

Personal calificado
Si se te hace difícil seguir alguna de las recomendaciones planteadas, no renuncies a Twitter pero cerciórate de contratar a una asistenta versada en la obra de Osho, con una ortografía impecable y -¡esto es fundamental!- profundos conocimientos geográficos del Lejano y Medio Oriente.

Ilustración: Irene Pizzolante
irenepizzolante@gmail.com
http://irenepizzolante.com

La Universidad de la Belleza

Me entero de que en el país existe “La Universidad de la Belleza” dirigida por la agraciada Giselle Reyes, quien en 1985 representó al entonces Departamento Vargas en el Miss Venezuela y cuyos conocimientos de la industria de la hermosura hoy imparte entre las sirenas y los adonis criollos. Según la página web de dicho plantel (www.gissellereyes.com), el pensum se extiende a ambos sexos e incorpora asignaturas tales como Maquillaje, Protocolo y Oratoria, e Imagen y Vestuario, materias cruciales en un rubro donde hemos descollado significativamente pero que aún ofrece ambiciosas metas por alcanzar; no obstante y debido a la crisis que afecta al sector educativo, en especial a los estudios de pregrado indistintamente de su naturaleza, no resulta inaudito suponer que también en este recinto académico se adelantan acciones urgentes destinadas a buscar salidas:
- ¡Esculturales compañeros y compañeras! -abre la asamblea la presidenta del centro de estudiantes, tras sorprender con un impecable medio giro sobre el extremo de la pasarela-, nos hemos reunido en una mañana tan linda como ésta porque no podemos seguir indiferentes ante la emergencia educativa nacional, ese horroroso estrangulamiento presupuestario que afecta el suministro de secadores de pelo y máquinas bronceadoras de ésta, la casa que vence las sombras y los delineadores.
- El déficit ha llegado al cafetín, donde se observa un terrible desabastecimiento de bebidas light, yogures y queso ricotta ¡Demasiado! Hay que actuar de inmediato contra este régimen alimenticio -expone una de las educandas, luciendo un traje lila que combina regiamente con el forro de los cuadernos.
- Otro problema es el infaliz material hemerográfico de la biblioteca, donde sólo se consiguen Cosmopolitan y Vogue de cuando las hombreras estaban de moda -añade otra alumna-. Y ni hablar de la flexibilización de los criterios de ingreso, lo que lleva a que se matriculen bachilleres sin la debida preparación, que si con revolveras y horquetillas ¡Algunos hasta opinan que la belleza se lleva por dentro!
- Un momentico, ustedes como que viven en otro reino -interviene un becario de obvia tendencia oficialista-. Recuerden que los mercados populares ofrecen una generosa provisión de sábila con cuyas propiedades astringentes superaremos la emergencia.
- ¿Pero qué nos dices de la reciente crítica gubernamental a los implantes mamarios? ¡El colmo! Nuestra única opción es radicalizar la dieta encadenados a las puertas de la Quinta Miss Venezuela, o sea, protestar.
- ¿Y para eso hay que pedir perdón o pedir permiso? ¿Y si viene la “ballena” y nos estropea el secado? -comenta la ni ni del grupo-. Además, ya aquí llevamos tiempo pasando hambre, a punta de lechuga y solución salina, sin conseguir otra mejora que no sea esta envidiable cintura de avispa.
- Es definitivo: ahora mismo desfilamos hasta el Poliedro, lo que tal vez no resuelva la situación pero sí nos endurecerá notablemente las batatas. Alcemos nuestras consignas: ¡Persistir será nuestra Victoria´s Secret! ¡Ubellistas por la libertad de esplendor!
- ¡No renunciaremos como lo hizo Elluz Peraza! ¡Al Miss Universo por asalto!
- Viva la U, viva la U, viva la universidad ¡U, U, U… B! ¡U, U, U… B!

Ilustración: Irene Pizzolante
irenepizzolante@gmail.com
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La “mente”

Tras recoger el auto del taller mecánico piso el acelerador y corro a casa, alentado por el ángel de mi señora que llama para anunciarme que está por sacar del horno chuletas en salsa de duraznos, mi platillo favorito y que a ella, todo un sol, le queda de rechupete, al igual que las masitas de chocolate y los besos inesperados entre muchísimos detalles más ofrecidos con ternura durante las últimas semanas en las que se nota su esfuerzo por reanimar esta relación que creíamos perdida, ofrecernos otra oportunidad y superar las desilusiones que poco a poco malogran a toda pareja de años. Como una manera de retribuir tanta abnegación, prometo atender sus ruegos y cederle espacio, renunciar a mis hábitos insoportables como dejar la toalla mojada sobre la cama y hacerme una mente por todo, manía esta que me ha costado más de un empleo y no pocos amigos, sin contar por supuesto las furiosas discusiones por andarla acusando a ella de revolcarse con el carnicero y hasta con el mecánico que me arregla el carro ¡Válgame dios! Si ese sujeto es un caballero incapaz de tamaña infamia; además, si tuvieran un jujú no cometería el descaro de preguntar por mi señora cada vez que llevo el auto al taller… aunque, pensándolo bien, ella también pregunta por él siempre que regreso de allí. Y eso es muy raro, que la mujer de uno exprese aunque sea un pequeño interés por el mecánico que te arregla el carro es la cosa más extraña de este mundo, no, no, no, desde luego que se trata de otra de mis alocadas especulaciones. Pero… ¿y si no son especulaciones? Se ha dicho, a los paranoicos también los persiguen ¿Y si a mis espaldas ambos mantienen un romance? Es improbable… pero no imposible. Veamos. Ella lleva su auto al mismo taller. Y sola. Y por tonterías como examinarle el aire a los cauchos, cosa que bien podría resolver en una estación de gasolina ¡Qué estúpido he sido! Es que no hay que ser un lince para imaginarlos retozando en aquel grasiento cuchitril. O en mi propia cama, ¡sobre la toalla mojada!, aprovechando mi ausencia para sus vagabunderías y quién quita si hasta para organizar los detalles de una conspiración en mi contra. Las cuentas encajan: yo con el colesterol por los cielos + chuletas = la tipa procura obstruirme las arterías para provocarme un ataque cardiaco y así quedar a sus anchas con el tercio de su amante, pero se equivoca si piensa que se saldrá con la suya, me las va a pagar, ya verá; apenas yo llegue a casa la obligaré a confesar su traición y si corre sangre, ¡pues que corra!, al carajo con las masitas de chocolate y los besos inesperados entre muchísimos detalles más con los que súbitamente busca recuperar esta relación que ya creímos acabada. Ahora, y estudiando con detenimiento el conjunto de posibilidades, he de admitir que el presunto bochinchito quizá no sea más que otro de mis delirios provocados, como ella dice, por esta mala costumbre de hacerme de todo un coco ¡Qué imaginación la mía, señores! Si hasta he de darme con una piedra en los dientes por tener a mi lado a ese sol, a ese ángel, así que lo más sensato es detenerme por ahí a comprar el vinito que tan bien combina con las chuletas en salsa de duraznos y en cuanto llegue a casa, eso sí, llamar al mecánico para reclamarle en muy buenos términos, no faltaba más, el porqué olvidó ajustar apropiadamente los frenos del carro.

Ilustración: Irene Pizzolante
irenepizzolante@gmail.com
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Ideas para Lady Gaga

Podría pensarse que luego de vestir un traje de carne cruda, llegar en el interior de un huevo a los premios Grammy y concebir una fragancia basada en fluidos corporales, a la diva estadounidense se le está agotando el arsenal de sorpresas con las que habitualmente estremece a su público, pero nada más lejos de la verdad: aún sobran alternativas para que Lady Gaga continúe desafiando la capacidad de asombro del planeta, algunas de las cuales sugerimos con suma generosidad en las siguientes líneas, así como a través de Twitter mediante el hashtag #ideasparaladygaga, con el que a partir de hoy tú también podrás participar en esta noble causa:
- Durante una rueda de prensa, se quita los lentes y la peluca y revela que es Charlie Sheen.
- En medio de un concierto y vestida con un traje de cisne blanco, se rasura el cabello mientras devora un murciélago y cuelga de su cuello una botellita que contiene la sangre de su novio.
- Con la luna de fondo, vuela en una bicicleta en busca de sus parientes que al otro lado del bosque la esperan para volver a casa.
- Se vuelve a poner un vestido de carne cruda, pero esta vez con bistés suministrados por PDVAL.
- Adquiere en una subasta la cápsula de oxígeno anteriormente propiedad de Michael Jackson, cuyo mecanismo revierte para oscurecer su piel.
- Construye dos millones de viviendas en dos años.
- Aclara que NO es hermafrodita.
- Aparece en los premios “TV y Novelas” envuelta con la peluca del Tío Cosa.
- Gracias a los poderes del Lado Oscuro de la Fuerza, recobra la vida dispuesta a reconstruir la Estrella de la Muerte.
- Durante una presentación en los premios “Lo Nuestro” se da un beso con Mayré.
- Se confecciona una tiara con chinchurrias que combinan espléndidamente con el juego de zarcillos inspirado en mollejitas de pollo.
- Apoya a Henry Ramos Allup para las elecciones primarias.
- Asiste a los próximos Grammy dentro de un ñame.
- Demanda a una empresa londinense fabricante de helados de leche materna (bueno, eso acaba de hacerlo, pero ahora aclara que la demanda se debe a que le robaron la idea).
- Asiste a los Oscar vestida de Tinky Winky, el teletubbie morado.
- Confirma que es la hermana perdida de Laura Bozo.
- Para cenar, pide lumpias y costillitas en un restaurante chino de la Baralt.
- Saca al mercado un acondicionador de cabello con pega Hércules como ingrediente principal.
- Recorre Petare a las 4 de la madrugada. ¡Y sale viva!
- Interpreta a dúo una canción con La Tigresa de Oriente.
- Sale al escenario sin un gramo de maquillaje y vestida normalita. El mundo, entonces, se asombra como nunca ante los excesos de la diva.

Ilustración: Irene Pizzolante
irenepizzolante@gmail.com
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Suerte de almohada

El próximo sábado 2 de abril las personas y hasta los países que permanezcan atascados en el callejón de un conflicto tendrán la oportunidad de resolver sus diferencias de manera definitivamente esponjosa: como viene ocurriendo desde hace varios años en Nueva York, Sao Paulo, Sidney más otro medio centenar de ciudades, se celebrará en tal fecha el Día Mundial de Peleas de Almohadas, mullido guateque organizado en Caracas por el colectivo “Ser urbano” como una manera de suavizar la urbe y en cuyo reglamento sobresale que la almohada elegida para salir al campo de batalla reúna el mayor grado de ligereza posible, así como se recomienda no embestir a peatones “desarmados” de la blanda herramienta, principalmente policías, guardaespaldas de altos funcionarios públicos y mujeres con un bebé entre los brazos.
A riesgo de que el asunto parezca una extensión de esa práctica de ordinario uso entre las quinceañeras cuando se juntan para una pijamada, saludo con entusiasmo esta iniciativa que toma como protagonista a uno de mis enseres favoritos y de los más gentiles y enigmáticos de todos los que hay en casa. Según Wikipedia, la palabra almohada proviene del árabe andalusí jadd, que quiere decir “mejilla”, aunque particularmente prefiero la versión que la hermana con el término Al-Muwahhidun, cuyo significado es "el que profesa la unión con Dios". Y es que pocas horas se parecen más al cielo como aquellas cuando apoyamos la cabeza sobre el objeto que en la Tierra mejor imita una nube.
El democrático invento es versátil, además de anidar la nuca para el descanso y ponerles rueditas a los sueños que soñamos ya sea despiertos o dormidos, en ciertas noches también sirve de pañuelo; y que no nos llame a engaño su cercanía con la inactividad física: los observadores frívolos relacionan la almohada con la pereza cuando, por el contrario, las mejores ideas llegan cuando la oreja, como a la espera de un dictado importante, se recuesta sobre esta dulce superficie. La almohada es la oficina de quienes trabajan con el pensamiento. Y al igual que toda cosa interesante, también conserva un lado oscuro al servir de muelle de las pesadillas y hasta de utensilio letal, al punto que tanto en el cine como en la vida abundan las escenas donde la almohada actúa de asfixiante instrumento de aniquilación.
Es depósito de las caricias sobrantes (“mi beso se hiela sobre la fría almohada”, compuso el poeta Baldomero Fernández Moreno) y de un tiempo para acá los asiáticos llegan al colmo de casarse con sus almohadas, que si a ver vamos ni tan malo es al abolir las disputas por el control remoto de la tele así como la intromisión de parentela política, que en este caso no son más que unos dóciles cojincitos. Desafortunadamente, todas ellas corren con la misma suerte de ciertos idilios. Cuando la costumbre y el tiempo aplastan su lozanía, es sustituida sin escrúpulos por otra más joven y fresca, hay amores que terminan como almohadas, porosa morada de jejenes y olvidos.

Ilustración: Irene Pizzolante
irenepizzolante@gmail.com
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